Opinión

Vivir sin miedo y con dignidad

"En las próximas elecciones no solo nos jugamos el Congreso y la Presidencia, nos vamos a jugar la democracia y como consecuencia de ella, nuestras libertades que son ineludibles para vivir sin miedo y con dignidad"

Por: Óscar Barreto

 

Insisto permanentemente en el ejercicio de las libertades individuales y colectivas, como derechos conquistados y logrados, que debemos defender para no perderlos, garantizados por la seguridad, gran valor de la democracia permanentemente vulnerables en medio de las contiendas por el poder y la ideologización recurrente de los temas importantes, delimitados no, para la riqueza del debate y la formación ciudadana, sino para la confrontación y el provecho político electoral.

Nuestras libertades hoy se encuentran en riesgo, por muchas circunstancias; la más grave convulsión social, provocada por la violencia, el abandono del Estado y la inequidad, sin duda se suma la crisis de nuestras instituciones, que necesitan urgentemente recobrar su independencia, credibilidad y sincronía, como controladores y reguladores de nuestra mal llamada sociedad, cada una desde su contexto, como diría un gran amigo autóctono tolimense, “cada loro en su estaca”. El que es libre elige entre varias opciones lo que le parece mejor o más conveniente, tanto para su bienestar, para el de los demás o el de nuestro país, sin embargo hoy han hecho carrera, fenómenos distintos a los represivos que afectan el ejercicio pleno de la libertad, las fake news, los argumentos falsos con disfraz de verdad, la corrupción electoral que constriñe voluntades y reduce el ejercicio ciudadano a lo transaccional, abandonando el interés colectivo, la mediocridad de la dirigencia y de algunos que se hacen llamar líderes, entre otras.

En las próximas elecciones no solo nos jugamos el Congreso y la Presidencia, nos vamos a jugar la democracia y como consecuencia de ella, nuestras libertades que son ineludibles para vivir sin miedo y con dignidad. Nuestra gente lo que necesita es seguridad, para tener empleo, para generar sus ingresos, seguridad social para tener educación, salud y bienestar, seguridad ciudadana para sentirse pertenecientes al Estado Nación, que los protege y les brinda oportunidades, entre otras tantas seguridades que necesitamos establecer en nuestro país. Estamos llamados a defender la libertad, para ello debemos darle fuerza a la seguridad que necesita la gente, con equidad, presencia del Estado, fortaleza e independencia en las instituciones y dirigentes capaces con vocación de servir, no de servirse.