Reitero que siempre será más importante hacer, el hacer habla, el hacer es realidad, es tangible y prevalece.
Por: Óscar Barreto
Colombia atraviesa una crisis de liderazgo en diferentes contextos de la sociedad, la inequidad y la falta de oportunidades en un mundo cada vez con menos fronteras y más exigente, agigantan una brecha, que sin duda reflejan una realidad de nuestros rezagos educativos, descubrimiento de talentos y por ende de generación de riqueza.
He dicho que para definir el liderazgo se requiere sin duda de análisis desde distintas ópticas, el líder siempre contiene actitudes diferenciales, formas diferenciales de ver la vida, formas diferenciales de actuar y por supuesto formas diferenciales de abordar y resolver las crisis. El liderazgo actual necesita otro tipo de habilidades que le permitan interpretar las circunstancias del mundo, las tendencias y mega tendencias, como aplicar estas en el contexto social en que vive y sobre todo coherencia, el verdadero líder es coherente entre lo que dice y hace. Reitero que siempre será más importante hacer, el hacer habla, el hacer es realidad, es tangible y prevalece. La capacidad de comunicación critica es inherente al líder, no tragar entero es importante, este no solo debe tenerla sino promoverla en sus liderados, el líder moderno genera espacios y oportunidades, no usa la represión para imponer su criterio, es la persuasión y el argumento el instrumento para convencer.
La mediocracia, la ley del atajo, el dinero, la violencia y por qué no decirlo, el desdén, la arrogancia y la soberbia de quienes han ostentado el poder, nos han llenado de charlatanes con apariencia de líderes, de mediocres que utilizan otros medios para imponerse, pues para ellos ejercer la crítica en medio de la inequidad y el desprestigio de las instituciones del estado y de la sociedad, es rentable, sobre todo en nuestro país donde se adolece en demasía de formación ciudadana. Debemos formar lideres capaces de abordar situaciones difíciles, de reconocer que estamos en dificultades, de enfrentar con creatividad solidaridad y valentía los graves problemas de nuestra sociedad, necesitamos más hacedores y menos charlatanes, necesitamos más seres humanos sensibles y empáticos, necesitamos buenos colombianos, más que grandes colombianos.